Mi impresión
El día que subimos al Pico Salvaguardia amaneció un poco frío, revuelto y lluvioso, todo lo contrario que el día anterior. Son de estos días que miras por la ventana para ver qué tiempo hace (y si coincide con las predicciones meteorológicas) y te encuentras con las cumbres totalmente cubiertas por las nubes. Es entonces cuando, todavía con lagañas en los ojos, piensas si volverte a la cama todavía caliente o hacer la excursión de todas formas. Eligiendo la segunda opción y ya en el parking , abarrotado de coches y gente, las nubes todavía deambulaban por las alturas, pero si algo tengo claro es que en la montaña el tiempo cambia en momentos. Un día gris puede transformarse en sol y luz y viceversa en minutos. Así que mirando de reojo al Pico Salvaguardia y con muchas ganas de abordarlo comenzamos la excursión. El día fue magnífico, con un sol radiante, y aunque en el descenso nos acompañaron en los talones las nubes no nos impidieron disfrutar del paisaje.
Subir al Pico Salvaguardia es una excursión típica del Valle de Benasque, no tiene dificultades técnicas, no es muy exigente, no requiere de demasiado tiempo y las vistas son inmejorables. Hay niños que suben sin problema aunque hay que estar muy encima de ellos porque el último tramo tiene importantes cortadas y el suelo al ser de roca puede ser deslizante si está húmedo. También si se tiene vértigo como yo te puede impresionar un poco algún paso, pero no es difícil.
Cómo llegar
Para llegar a Benasque desde Huesca se toma la A-22 hasta Barbastro, después la N-123 y la N-123a hasta Graus y a continuación la A-139 hasta Benasque.
Desde la localidad de Benasque, hay que coger la A-139 y llegar con el coche hasta el parking de los Llanos del Hospital, un poco antes del conocido Hotel Hospital de Benasque. Aunque la carretera continúa recta después del hotel, durante los meses de verano, como es el caso, está cerrada al tráfico mediante una barrera. Solamente es posible pasar o andando o en autobús así que hay que dejar el coche aquí.
Al Pico Salvaguardia paso a paso
Si tenéis ganas de caminar podéis comenzar la excursión desde el aparcamiento de los Llanos del Hospital y cruzar andando la estación de esquí de fondo, pero si os queréis ahorrar una hora de camino, desde el mismo parking sale un autobús cada media hora o así que te deja en la zona conocida como La Besurta (a tan sólo unos metros del inicio del sendero al Pico Salvaguardia). Si vais en bus, una vez en la Besurta, tendréis que retroceder un poco andando por la misma carretera por donde acabáis de venir o , si no, podéis decirle al chofer, como hicimos nosotros, que os pare en el punto de inicio.
El sendero sale de la misma carretera, a la izquierda de un poste de madera con las indicaciones (Puerto de Benasque, Puerto de la Picada y Pico Salvaguardia).
Durante un rato subimos por un sendero perfectamente marcado en zig zag por la verde y mullida ladera siguiendo a los pequeños grupos de gente que van por delante.
A nuestra izquierda el sol , todavía bajo por el amanecer, ilumina las altas cumbres, algunas todavía con nieve.
El rocío de la mañana se deja ver en los pétalos de las flores, como las de este lirio.
Alcanzamos el GR-T-46 y continuamos dirección Portillón de Benasque, siguiendo la flecha. Por el lado contrario nos desviaríamos hacia el Hospital de Benasque.
Y llegamos al primer llano de la excursión donde nos espera un pequeño ibón.
En las aguas del Ibón se refleja la silueta desdibujada del Pico Salvaguardia que queda justo enfrente. Teniendo como referencia la cima, continuamos caminando, atravesamos un prado sin desnivel y seguimos ascendiendo en amplios zig zag por la senda. Detrás nuestro cuando las juguetonas nubes lo permiten asoma la punta del Aneto detrás de los picos Maladetas.
Bien a la subida o a la bajada tendremos que desviarnos unos pocos metros de nuestra ruta para llegar al Portillón de Benasque a 2440 m, paso entre Benasque y Luchón desde el siglo XVI. Una placa con una breve explicación de la historia del Puerto de Benasque se encuentra a mitad del paso.
Después del Portillón volvemos a la senda para continuar hacia el Salvaguardia. Hay que atravesar algunas zonas de piedra con cuidado porque, como he comentado al principio, la roca está muy fina y lisa y donde hay humedad resbala un poco.
Bastante cerca ya de la cima asomándonos a la vertiente francesa nos topamos con los Ibones Boms deth Ports de un azul intenso precioso !
Nos encontraremos con un tramo con cadenas para facilitar el paso pero no tiene ninguna complicación. Yo que tengo bastante vértigo lo pasé sin problema. Quizás me dieron un poco más de impresión las cortadas de antes y las de después pero curiosamente sólo en la subida. Al bajar creo que ya me había acostumbrado a las vistas de las inclinadas paredes y el valle chiquitito allá abajo.
Después de unas 2h y 3 cuartos alcanzamos la cima, por cierto bastante concurrida. Como en la mayoría de los picos las vistas en 360º son espectaculares. En unos minutos el pueblo francés de Luchón que vemos a lo lejos queda cubierto por las nubes y la niebla que envuelve todo el lado francés se queda enraizada en el pico Salvaguardia. Por suerte las vistas hacia el Valle de Benasque y hacia los Maladetas son perfectas.
Comerse un bocata en este entorno no tiene precio !!!
Y regresamos ! Con la energía recargada y con la niebla en los talones comenzamos el descenso por donde hemos subido.
De vuelta en la Besurta esto es lo que nos espera !! Interminables colas de gente con rostros cansados pero satisfechos esperando al autobús. Lo normal en verano y en una zona con tanto atractivo como esta.
Galería de Fotos