Mi impresión
Junto con otros picos del Prepirineo oscense como Gratal, el Pico del Águila o el Puchilibro, el Pico Peiró es otra de las cimas sencillitas que os recomiendo hacer. Siempre he oído que la mejor época para subir al Peiró es el otoño por la magnífica gama de colores que podemos visualizar en su Hayedo. Nosotros lo hemos hecho en invierno y aunque los colores no son tan variados e intensos como en otoño, la fina capa de hielo que cubría la vegetación como un inmenso manto blanco formaba un paisaje auténtico ! El único inconveniente que encontramos, a parte del viento helador que nos congelaba los tímpanos en el último repecho, fueron los cazadores. Se oían continuamente disparos al otro lado, supongo que fuera ya del área protegida, y un jabalí asustado pasó corriendo desesperadamente unos metros por delante nuestro hacia el sendero por donde se accede a la cima. Fue una suerte no topárnoslo de frente !
El Pico Peiró está ubicado entre las cabeceras de los ríos Garona e Isuela, detrás de la Sierras de Loarre y en uno de los extremos de la sierra de Gratal. Tiene una silueta fácilmente reconocible.
Cómo llegar
En primer lugar tendremos que llegar a la localidad de Arguis tomando desde Huesca la A-23 . Una vez en el Pantano de Arguis y en la antigua Hospedería nos desviamos hacia el pueblo por la carretera comarcal. Pasamos el pueblo de Arguis siguiendo la HU-V-3001 (dirección Bentué de Rasal) y a los pocos kilómetros tendremos que seguir por la pista que se abre a la izquierda y que os muestro en la foto de debajo del mapa. La señal de madera indica «Pico del Peiró» y «Pozos de Hielo Las Calmas«. Como veis el objetivo queda justo en frente, ese pico con estratos verticales de roca caliza y de forma un tanto redondeada.
Continuamos conduciendo por la pista un rato, aproximándonos a la zona arbolada, y no paramos hasta alcanzar la señalización granate con el logotipo del «Camino Natural de la Hoya de Huesca». Ahí mismo se puede dejar el coche. Si siguiéramos recto en 5 km llegaríamos a la Presa de Arguis pero en la presa no hay salida con el coche hacia la carretera, sólo a pie. No hace falta todoterreno, con un coche normal se va bien.
Al pico Peiró paso a paso
Una vez localizado el inicio de la ruta vemos un panel informativo con el símbolo en azul claro de la Hoya de Huesca. Ahí mismo, entre pinos , comienza la excursión!
…… y precisamente comienza con una fuerte subida que te quita el aliento. Además como los árboles no dejan pasar la luz del sol, el suelo está helado y con algo de nieve que ha caído en los últimos días así que resbala un poco. Pero en fin, es lo que tiene el invierno…. En algunos tramos se han habilitado escaleras hechas con troncos redondeados de madera como las de la foto.
Tras la fuerte subida se llega a un mirador ,una zona llana con barandillas en un lateral desde donde casi podemos «tocar con la mano» la ladera del Pico Peiró.
En nada nos encontramos bajo el Hayedo del Peiró de un importante valor ecológico. Está catalogado como Lugar de Importancia Comunitaria dentro de la Red Natura 2000. Yo todavía no he tenido la oportunidad de verlo en otoño pero , como comentaba al principio , en esa estación tienes que presenciar todo un estallido de colores.
Después de atravesar el hayedo y caminar unos minutos por llano volvemos a ascender por una senda en terreno abierto que se abre paso entre bojes y erizones.
Llega un momento en que la senda se va desviando hacia la derecha hasta encarar el último repecho que nos lleva a la cima. El hielo y la nieve salpican de blanco la abundante vegetación.
En poco más de 1 hora alcanzamos totalmente congelados la cima del Peiró. A lo lejos , en el norte se divisan los Pirineos, desde el Pico Bisaurín hasta el Cotiella, hacia el este, allá abajo, vemos la amplia llanura donde se encuentran los pueblos de Bentué de Rasal y Rasal, hacia el sur nos protegen las sierras de Caballera, Loarre y Gratal y por el oeste el Pico del Águila y el Pantano de Arguis.
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