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Mi impresión
El Valle de Estós, próximo a la localidad pirenaica de Benasque, es una zona donde predominan las altas cumbres que rozan los 3.000 metros y hay numerosos Ibones bastante próximos unos de otros. En una misma ruta se puede acceder a varios de ellos dependiendo de como la organicemos.
Nosotros decidimos hacer una ruta de ida y vuelta por el mismo camino al Ibón Grande de Batisielles pasando por el minúsculo Ibonet de Batisielles pero existen otras alternativas. Podéis por ejemplo, si vais bien de tiempo, aprovechar y acercaros al Ibón de Escarpinosa (ideal para ir con niños puesto que hasta aquí no hay mucho desnivel) o bien hacer una ruta circular y desde el Ibonet volver por el Refugio de Estós (A 1h30 del Ibonet). Por supuesto hay muchas más opciones, estas son sólo algunas ideas.
La excursión no presenta ninguna dificultad y hasta el Ibonet es un paseo. El segundo tramo tiene más desnivel por lo tanto te cansas más, pero merece la pena ya que durante la subida hay unas vistas increíbles. Además una vez en el Ibón Grande de Batisielles se ven recompensados tus esfuerzos por el paisaje con el que te encuentras. No obstante tener en cuenta que la excursión en total son 1.000 metros de desnivel que ya empieza a estar bien.
Cómo llegar
Para llegar a la localidad de Benasque desde Huesca capital cogemos la A-22 hasta Barbastro y nos desviamos por la N-123 y N-123a hasta Graus. Continuamos por la A-139, N-260 y otra vez A-139 y llegamos a Benasque.
La ruta al Ibonet y a los Ibones de Batisielles comienza en el Valle de Estós. Para llegar al inicio del sendero y a la zona de aparcamiento se toma la carretera A- 139 desde Benasque , hay que continuar recto en la rotonda a la salida del pueblo, pasar el Camping Aneto a la izquierda y cruzar el Puente San Jaime y ya enseguida vemos un cartel que indica Valle de Estós – GR- 11. A tan sólo 500 metros se encuentra la explanada que sirve de aparcamiento.
Al Ibón de Batisielles paso a paso
Bajamos del coche, respiramos profundamente el aire puro de las montañas y localizamos el inicio de la ruta entre un panel informativo y las señales que indican «Cabaña de Santa Ana» , «Cascadas de Gorgas Galantes» y «Refugio de Estós».
Tras subir un tramo de escaleras y recorrer unos metros enlazamos con el GR- 11 (marcas rojas y blancas), siguiendo a continuación por una pista asfaltada que va paralela a la presa y al Embalse de Estós. Nos adentramos en el Parque Natural Posets Maladeta
El río Estós, que desemboca en el Embalse lleva bastante caudal ahora en verano y merece la pena parar un rato y contemplar la fuerza de la corriente. Lo cruzamos por un puente de madera, conocido como la palanca de L´Aiguacari y llegamos al refugio pastoril de la Cabaña de Santa Ana.
Y después pasamos por la Fuente de Coronas de agua potable fresquísima.
El camino se bifurca en dos, a la derecha lleva al Refugio de Estós siguiendo el GR-11 y el de la izquierda , que es el que tomaremos , al Ibonet de Batisielles. Hasta este punto apenas hay desnivel pero desde aquí el sendero, que discurre en zig zag entre frondosos árboles, empieza a empinarse un poco.
En unas dos horas aproximadamente llegamos al pequeño pero bonito Ibonet de Batisielles rodeado por bosques de pinos y de altas montañas que a esas horas se reflejan en la superficie de sus aguas.
A 40 minutos se encuentra el Ibón de Escarpinosa, salvando solamente 100 metros de desnivel, de ahí que muchas familias con niños opten por hacer la excursión hasta allí. La dirección que hay que tomar está muy bien señalizada. Nosotros lo descartamos pero creo que merece la pena ir porque dicen que es precioso !
Nuestro objetivo es el Ibón Grande de Batisielles por lo que tomaremos el sendero que asciende a la izquierda de la caseta de piedras que hay junto a la señalización.
Una hora de camino nos separa del Ibón Grande de Batisielles. Primero atravesamos una ladera muy pedregosa , sin ninguna dificultad, esperándonos a lo lejos y justo en frente las puntiagudas Agujas de Perramó. Al volver la cabeza atrás unas impresionantes vistas nos sorprenden. Algunas nubes enraizadas en las altas cimas de laderas verdes y extensos bosques de pinos forman un paisaje espectacular.
Y finalmente, después de 3 horas (parando a hacer fotos y a picar algo) y tras superar las últimas rampas, llegamos a las orillas del Ibón Grande de Batisielles de aguas nítidas con reflejos verdosos. No están demasiado frías, perfectas para refrescar los pies dentro, y para darse un baño quien se atreva. Si tenéis tiempo bordear un poco el Ibón hacia la derecha, las vistas de éste son más bonitas todavía. En lo alto las Agujas de Perramó (2.553 – 2.542) y la Tuca de Batisielles (2.845) dan cobijo al Ibón. A lo lejos se aprecia también la Tuca Mincholet (2.865)
La bajada la hacemos por el mismo sendero que la subida.
Galería de Fotos
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